Antes de entrar en materia me gustaría explicar porqué en España la Osteopatía no es una profesión sanitaria de primera intención y porqué incluso algunos profesionales sanitarios la consideran una terapia alternativa sin base científica.
Vamos a poner en contexto la profesión osteopática dentro del mundo, de Europa y de España para ver y entender porqué en nuestro país se denosta una profesión que en otros países está incluida en la sanidad pública.
En algunos países como Estados Unidos la Osteopatía se estudia dentro de Medicina, por lo que los profesionales osteópatas son médicos. Es más, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce la necesidad de integrar la Osteopatía dentro de las actuaciones sanitarias para mejorar la salud de la población
Es por ello que se han creado diferentes instituciones que aúnan a los profesionales de la Osteopatía. La EFFO nace de la unión de European Federation of Oste
opaths (EFO) y el Forum for Osteopathic Regulation in Europe (FORE). La EFFO reúne asociaciones de osteópatas de diferentes países europeos y lucha por una regulación de la osteopatía como profesión sanitaria de primera intención en todos los países de Europa. Dentro de la EFFO se encuentra la Federación de Osteópatas de España (FOE).
¿Cuál es la situación en España?
En España, hay diferentes asociaciones de osteópatas,
pero sólo 3 de estas asociaciones aceptan osteópatas con conocimientos debidamente acreditados. Se trata de de la Sociedad Europea de Medicina Osteopáticoa (SEMO), de la Asocición de profesionales de la Osteopatía-APREO y del Registro de Osteópatas de España-ROE. A este último, tengo el honor de pertenecer con el nº de socia 741. Estas 3 entidades forman la Federación de Osteópatas de España (FOE).
Esto es importante de cara a la protección de los pacientes que reciben tratamiento osteopático. Actualmente en España no existe una regulación clara. Esto supone que un paciente que acude a un osteópata en España no sabe exactamente a qué tipo de osteópata está acudiendo. Puede ser un profesional sanitario con un máster o postgrado de Osteopatía de varios años; puede ser un profesional que haya estudiado Osteopatía en una universidad de un país europeo donde es una profesión sanitaria de primera intención; o puede ser que sea un profesional sanitario que haya estudiado algún posgrado de varios fines de semana; o incluso puede que no sea profesional sanitario que haya estudiado algunos cursos de fin de semana. Es obvio que la atención, la profesionalidad y los conocimientos no son los mismos en todos los casos.
Si queremos proteger tanto a nuestros pacientes como a nuestra profesión urge una regulación clara y acorde con lo que está pasando en Europa. No lo podemos posponer más, en beneficio de todos. Existen muchos “osteópatas” que están trabajando “legalmente” como tales en nuestro país que no tienen la formación suficiente para ejercer esta profesión.
Actualmente existe una regulación completa de la Osteopatía en 11 países europeos: Dinamarca, Finlandia, Francia, Islandia, Liechtenstein, Luxemburgo, Malta, Portugal, Suiza, Reino Unido e Italia. Italia acaba de aprobar su regulación hace unas semanas. Chipre y Noruega se encuentran en proceso de regulación.
La tendencia hacia donde nos dirigimos todos los países europeos es hacia una regulación conjunta. No tiene sentido que esta profesión tenga diferentes regulaciones en distintos países de Europa. Por ello, tarde o temprano también en España se va a convertir en una profesión sanitaria de primera intención.
El Parlamento Europeo reconoce la Osteopatía.
Urge el reconocimiento sanitario de la osteopatía en España.
Helena Feijóo Salvador
Osteópata DO
mROE